¡Te desafío!

Manuel, Alejandro y Horacio de Pompeya desafiaron a los talleristas de Voces que cuentan que, a través de distintos cuentos, quisieron dejar mal parado el amor.

El amor será ciego, pero parece que el mundo no tendría luz sin él…

Esto escribieron los chicos en el Predio Portugueses después de una ronda de cuentos…

¡Como para no volver a creer en el amor!

Hoy es el día tan esperado por los dos,
Sí es la fecha tan esperada por los dos.
Esta noche nos espera un nuevo encuentro de acción y pasión.
A las luces de las velas y una copa de vino pactaremos un nuevo momento.
Los momentos pasados y los nuevos por pasar nos unificarán más en nuestra relación.

Manuel Quiroli, Pompeya


Cuando un hombre y una mujer se encuentran en un mismo lugar a la misma hora y sus miradas se cruzan y sus corazones laten más fuerte, eso quiere decir una sola cosa, que Dios quiso que los dos junten sus corazones y formen uno solo y así sean uno para el otro, por siempre.

Horacio, 17 años, Pompeya

Sin ti no tengo nada.
Te miré y volví a ver; te hablé y volví a escuchar; te toqué y volvió el sentido del tacto, muchas cosas me podrían pasar si seguís aquí. Hasta me podría morir. No sé si es un sentimiento o estás sólo en mi mente, y sea lo que sea me alegra que sienta esto por ti.

Alejandro, 17 años, Pompeya.

Hola Camila: la palabra que viene después de “querer”… es algo tan bonito perder la conciencia y estar todo el tiempo pensando en una persona. Capaz si volvés a intentar puede ser que tengas suerte. A parte yo pienso que en el mundo siempre hay una persona esperando tu cariño, afecto y consuelo.
Lo que necesitás es una persona que esté preparada a adaptarse a conocerte y satisfacerte.
Te aseguro que si volvés a intentar te va a ir bien y por fin vas a ser feliz.
Un consejo: El amor no es algo que queremos sentir, es algo que sin querer, sentimos.
Bye bye.

Ramón Cáceres, 15 años, Barracas

Cuando estoy junto a vos, siento algo muy hermoso. Tus ojos y tu sonrisa las tengo grabadas en mi mente. Sé que nunca estarás a mi lado. Sé que tenés miedo de demostrar tus sentimientos y sé que nunca te olvidarás de él. Pero lo que siento por dentro me está quemando el pecho. No paro de pensar un segundo en vos, duermo pensando en vos. Lo primero que hago cuando me levanto es pensar en vos… pero tengo que olvidar esto que siento porque me estoy muriendo.

Juan, 20 años, Pompeya