Esas no eran las reglas del juego,
no, no, no.
Me inyecté cariño
y tuve una sobredosis de amor.
No, no, no.
Fumé tu piedad,
¡Qué bien me hizo sentir!
y ahora soy adicto,
¡No me puedo resistir!
es que me pone loco, me hace feliz.
Bajo el cielo estrellado, me vuelvo a preguntar:
si soy tan miserable,
¿debo volver a inhaler tu simple e inmensa felicidad?
No,no, no.
Nunca dijiste que era así,
tampoco dijiste la verdad o insinuaste mentir.
Lastimé todo mi cuerpo, mi cabeza y sentir,
y al despegarme de tus sueños no sé si vivir o morir.
Es que íbamos bien, y me empezaste a consumir
por fuera, por dentro, las ganas de seguir.
No, no, no.
Juntos quebramos mi mundo…
…no sé qué decir…
Debo encontrar otra cosa, que a mi corazón haga latir.
Hallar sentido a la vida y mi mundo reconstruir.
No, no, no…
Soy adicto a ti.
No, no, no.
Así no puedo vivir.
No, no, no.
Ya no me hacés feliz!


Me di cuenta cómo sos esta mañana,
decidí olvidarte esta tarde
y pensé en vos toda la noche.

Sandra Karina Martínez, 15 años, Ssde Flores


Para mí el amor es como algo para tener ocupada todo el día la cabeza y eso está bueno porque no pensás en problemas que tengas en la vida, ¡aunque igual pensar todo el día en el amor a uno lo pone estúpido!
Cuando no tengo al amor que quiero tener cerca me agarra la idiotez, el aburrimiento o la depresión. Me gusta enamorarme, pero no ser la novia, no sé por qué. O sea, quiero que sea sólo mío, pero no ser la novia.

Joven de 15 años, sede Flores